MAL INICIO. La concentración de poder será la marca de la casa con Felipe Fernando Macías. Toda la transición estuvo en manos de Antonio Rangel y Antonio Romero, “Los Toños” que durante meses descuidaron sus encargos estatales para armar una nueva estructura y cumplir los compromisos del futuro presidente municipal de la capital, pero ahora el “anayismo” cargó el protagonismo en José Luis Báez, un colaborador brillante pero que al concentrar todas las decisiones retrasa las definiciones, no le da tiempo de ver todo.
DUDAS. A 12 días de tomar protesta hay muchos que no saben si llegarán al Centro Cívico y muchos que no saben si se irán. Quienes antes se quejaban del poder infinito de “Los Toños” en el entorno del alcalde electo, ahora lo hacen del futuro jefe de gabinete y por la reiterada manía de Macías de delegar su liderazgo.
SUDAN. Y hablando de transiciones, dos municipios tienen la alerta puesta sobre el futuro de sus alcaldes salientes: Pedro Escobedo, donde el panista Amarildo Bárcenas ya hasta pidió ayuda para cuadrar cuentas, y Tequisquiapan con el “independiente” Antonio Mejía Lira que intenta dejar un contralor “a modo” que le cubra las espaldas.