por Julio el de La Cruz
PERDIDO. Aunque por fin reapareció vía Facebook, Ricardo Anaya sigue jugando a las escondidas un mes después de las elecciones. Subió dos fotos, una con Damián Zepeda y otra con su familia, “aprovechando los últimos días de vacaciones de los niños...”, pero sus allegados no saben o no pueden decir dónde exactamente anda el excandidato. O sea que la reaparición del hombre más tormentoso del panismo ha sido completamente virtual, parece que anda vendiendo cara la reunión que tiene pendiente con AMLO.
LEJANO. Acá en Querétaro, tampoco nadie ve Ricardo Anaya desde hace mucho. En su casa del Club Campestre la última vez que estuvo (y sólo por unos minutos) fue cuando acudió a votar y salió volando hacia la CDMX. El mismo misterio guardan sus más allegados colaboradores. Algo trama el niño maravilla, o algo teme.