SE FUE. Mientras que la Policía Estatal toma el control de la policía municipal de Ezequiel Montes debido a la presunta colusión de su mando con un grupo de narcomenudistas, aún no aparece la presidenta municipal, Elvia Montes Trejo, para explicar el tema. Nada por aquí, nada por allá… Los muchos periodistas que han buscado a Montes reciben de respuesta que la morenista “está fuera de Querétaro” y que pronto aparecerá. Ajá.
DESCONFIANZA. A su regreso le espera una crisis, tal vez una de las peores padecidas por cualquier municipio queretano en materia de seguridad pública, y otra igual de grave pero de confianza pues para los empresarios del municipio, cansados desde hace rato de un gobierno de ocurrencias, lo del sábado fue la gota que derramó el vaso.
POR CIERTO. Ya se sabe cuál será, cuando haya, la respuesta de la alcaldesa Elvia Montes, al secretario estatal de Seguridad, Juan Marcos, y al fiscal Alejandro Echeverría: dirá que esa denuncia de que su jefe de la policía municipal colabora con bandas del narcomenudeo, es un complot para manchar a su administración y para quedarse con el manejo de la corporación. Y es que la circunstancia de Ezequiel Montes está que ni mandada a hacer para que la alcaldesa alegue esas barbaridades, ya que es la única alcaldía que gobierna el partido Morena en el estado y su policía el único cuerpo que no está bajo la influencia del grupo de poder que integran, dentro y fuera del Poder Ejecutivo estatal, tanto el secretario como el fiscal general.
