ENVIADOS. Lanzaron la piedra y ahora esconden la mano en la UAQ. Así fue como ex funcionarios de la Secretaría del Bienestar que estuvieron activos en el periodo del ex súper delegado federal Gilberto Herrera se manifestaron en la última sesión del año del Consejo Universitario: al solicitar la palabra para asuntos generales, con la voz quebrada juraron ser inocentes de la guerra sucia que se les atribuye haber dirigido contra la reelecta rectora Teresa García Gasca y su equipo.
ESTRATEGIA. Tras la derrota en las elecciones universitarias con Aurelio Domínguez, parece que el plan del Grupo Bienestar ahora será la victimización para treparse a alguna negociación que ponga a sus cercanos en espacios de la administración universitaria, si es que Teresa García Gasca lo permite, al iniciar el segundo periodo. Les ha pasado a otros rectores.
DESESPERADO. La estrategia de usar espectaculares para salir del anonimato comenzó en Querétaro, pero ya se extendió a Corregidora en una especie de “Plan B” para buscar ahora una diputación, una regiduría o… ¡lo que caiga! El notario Arturo Maximiliano García padece el exilio político panista por una traición a Mauricio Kuri, pero sufre más por la “Ley del Hielo” que le aplican en su nueva “casa”, Morena.