CAÍDA. Congelado quedó localmente y ante la mismísima Comisión Nacional de Derechos Humanos el senador Gilberto Herrera. En persona y vía el consejero Bernardo Romero Vázquez, el de Morena presionó para que, aun sin argumentos, la CNDH impugne la ley de aguas de Querétaro, cosa que no le concedieron, y el ex rector quedó sin bandera.
AMENAZA. Ya se sabía que Gilberto Herrera promueve la politización de las protestas contra la nueva ley, pero la confirmación vino desde la propia CNDH, que hizo público que el senador queretano acompañó a Bernardo Romero a decir que, si la Comisión no promovía la impugnación, “se les va a armar”. Sus formas de hacer “política”.
DENUNCIA. El viernes la CNDH hizo un extrañamiento “público y enérgico” a Bernardo Romero por declaraciones en un programa de la UAQ donde denuesta a funcionarios de la Comisión por resolver de la misma forma que la Defensoría estatal, además de revelar la amenaza de que “se les va a armar” y la presencia del senador Gilberto Herrera.
