/ lunes 17 de febrero de 2020

Cultura Tributaria

Impuestos, pagar lo justo y no más


Uno de los reclamos más recurrentes de los ciudadanos es la gran carga tributaria que se tiene, pensar que se pagan impuestos por todo, cuando obtienes el ingreso, cuando lo gastas, cuando tienes trabajadores, cuando conservas el patrimonio, pensar que hay otros que no pagan, otros que se lo roban, y así, tantas cosas que hacen que en lo posible el contribuyente se vaya ocupando de pagar lo menos incumpliendo con las obligaciones, cayendo en la evasión y desde luego en el riesgo.

Ser buen contribuyente no implica pagar más, sino pagar solamente lo que se debe entregar, pero para ello los contribuyentes debemos de estar atentos cada vez más en conocer los derechos y obligaciones que en el aspecto tributario tenemos, con el objetivo fundamental de no pagar más de lo que corresponde, ocupándonos en consecuencia de conocer la forma en que se calculan, las reglas para ello y los riesgos que se tienen ante el incumplimiento.

Por hoy los contribuyentes personas morales tienen una carga sobre las utilidades de hasta el 40%, que consiste en el 30% del impuesto sobre la renta y el correspondiente 10% de participación de los trabajadores en las utilidades de las empresas, ambos conceptos calculados sobre la utilidad fiscal, además de un 10% que deben pagar los socios o accionistas en el momento de recibir dividendos.

Las personas físicas por su parte determinan el impuesto sobre la renta aplicado una tarifa progresiva que pretende cumplir con los principios de proporcionalidad y equidad, estableciendo rangos por nivel de ingreso estableciendo once niveles, que implica llegar a una tasa máxima de impuesto del 35%.

La forma de pagar menos impuestos de manera legal, es en principio la aplicación correcta de la ley, atendiendo a que en ello hay contribuyentes que calculan sus impuestos y otros a los que se los calculan quienes les hacen los pagos, como en el caso de los trabajadores y efectúan la retención correspondiente para pagarlo al fisco mediante una declaración.

Los que deben de determinar la contribución de manera directa deben tomar en consideración que el punto de partida es contar en todo tiempo con los medios para demostrar que efectivamente se realizaron algunas operaciones y sobre todo que se cumple con los requisitos establecidos en la ley.

Para estos efectos, debe quedar claro que no se trata simplemente de no pagar impuestos, ello debido a que en el caso de hacerlo con el incumplimiento de la ley, o bien utilizando mecanismos de evasión fiscal como la simulación de actos, maquinación de engaños, aprovechamiento de errores en perjuicio del fisco, o simplemente no pagar lo que se debe, deja al contribuyente como un delincuente fiscal que puede traer como consecuencia la pena privativa de libertad.

Así las cosas, para tener al oportunidad de pagar menos impuestos siempre de forma legal, es conveniente cumplir con la ley, en primer término, verificar que se cuente con un comprobante fiscal digital que ampare las operaciones realizadas por adquisición de bienes, mercancías y gastos, pagar con cheque nominativo, transferencia o tarjeta de crédito o débito, tener un archivo de todos esos comprobantes en el formato denominado xml que por hoy es la única forma de demostrar la existencia del comprobante que exige la ley, evitar siempre las simulaciones y la evasión para no tener riesgos fiscales que puedan constar más que el beneficio obtenido temporalmente.

Finalmente debo hacer hincapié en que el uso de figuras agresivas que tienen como objetivo la evasión fiscal, como la compra de facturas que amparan operaciones inexistentes, no son la solución y que si dejan en grave riesgo a quien las utiliza.

Comentarios: Sergio@ledezma-ledezma.com

Facebook: Sergio.ledezma.58

*Expresidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro

Expresidente del la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionistas del Estado de Querétaro (FECAPEQ)

Impuestos, pagar lo justo y no más


Uno de los reclamos más recurrentes de los ciudadanos es la gran carga tributaria que se tiene, pensar que se pagan impuestos por todo, cuando obtienes el ingreso, cuando lo gastas, cuando tienes trabajadores, cuando conservas el patrimonio, pensar que hay otros que no pagan, otros que se lo roban, y así, tantas cosas que hacen que en lo posible el contribuyente se vaya ocupando de pagar lo menos incumpliendo con las obligaciones, cayendo en la evasión y desde luego en el riesgo.

Ser buen contribuyente no implica pagar más, sino pagar solamente lo que se debe entregar, pero para ello los contribuyentes debemos de estar atentos cada vez más en conocer los derechos y obligaciones que en el aspecto tributario tenemos, con el objetivo fundamental de no pagar más de lo que corresponde, ocupándonos en consecuencia de conocer la forma en que se calculan, las reglas para ello y los riesgos que se tienen ante el incumplimiento.

Por hoy los contribuyentes personas morales tienen una carga sobre las utilidades de hasta el 40%, que consiste en el 30% del impuesto sobre la renta y el correspondiente 10% de participación de los trabajadores en las utilidades de las empresas, ambos conceptos calculados sobre la utilidad fiscal, además de un 10% que deben pagar los socios o accionistas en el momento de recibir dividendos.

Las personas físicas por su parte determinan el impuesto sobre la renta aplicado una tarifa progresiva que pretende cumplir con los principios de proporcionalidad y equidad, estableciendo rangos por nivel de ingreso estableciendo once niveles, que implica llegar a una tasa máxima de impuesto del 35%.

La forma de pagar menos impuestos de manera legal, es en principio la aplicación correcta de la ley, atendiendo a que en ello hay contribuyentes que calculan sus impuestos y otros a los que se los calculan quienes les hacen los pagos, como en el caso de los trabajadores y efectúan la retención correspondiente para pagarlo al fisco mediante una declaración.

Los que deben de determinar la contribución de manera directa deben tomar en consideración que el punto de partida es contar en todo tiempo con los medios para demostrar que efectivamente se realizaron algunas operaciones y sobre todo que se cumple con los requisitos establecidos en la ley.

Para estos efectos, debe quedar claro que no se trata simplemente de no pagar impuestos, ello debido a que en el caso de hacerlo con el incumplimiento de la ley, o bien utilizando mecanismos de evasión fiscal como la simulación de actos, maquinación de engaños, aprovechamiento de errores en perjuicio del fisco, o simplemente no pagar lo que se debe, deja al contribuyente como un delincuente fiscal que puede traer como consecuencia la pena privativa de libertad.

Así las cosas, para tener al oportunidad de pagar menos impuestos siempre de forma legal, es conveniente cumplir con la ley, en primer término, verificar que se cuente con un comprobante fiscal digital que ampare las operaciones realizadas por adquisición de bienes, mercancías y gastos, pagar con cheque nominativo, transferencia o tarjeta de crédito o débito, tener un archivo de todos esos comprobantes en el formato denominado xml que por hoy es la única forma de demostrar la existencia del comprobante que exige la ley, evitar siempre las simulaciones y la evasión para no tener riesgos fiscales que puedan constar más que el beneficio obtenido temporalmente.

Finalmente debo hacer hincapié en que el uso de figuras agresivas que tienen como objetivo la evasión fiscal, como la compra de facturas que amparan operaciones inexistentes, no son la solución y que si dejan en grave riesgo a quien las utiliza.

Comentarios: Sergio@ledezma-ledezma.com

Facebook: Sergio.ledezma.58

*Expresidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro

Expresidente del la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionistas del Estado de Querétaro (FECAPEQ)