PRIMER ACTO. CICLO DE VIDA. La ciencia nunca miente, incluso si se aplican sus principios a los fenómenos sociales. Los partidos políticos, como “organismos sociales”, tiene su ciclo de vida igual que el de los seres vivos. Nacen, crecen, se reproducen y muren. Es el caso del PRI, partido político que como Partido Nacional Revolucionario (PNR) nació oficialmente aquí en Querétaro el 4 de marzo de 1929; creció hasta concentrar prácticamente todo el poder político del país, en un régimen de partido hegemónico que Octavio Paz calificó brillantemente como “dictablanda”; se reprodujo a partir de 1988 con el Frente Democrático Nacional que luego fue el PRD, así como en Convergencia (ahora Movimiento Ciudadano) de Dante Delgado y, en cierta forma en el PT de Alberto Anaya, el PVEM y hasta en Encuentro Social de Hugo Eric Flores; y, hoy es público y notorio que está muriendo. En el PAN, cuya evolución ha sido menos acelerada, quizá porque tardaron mucho en crecer, ya empiezan las reproducciones con Felipe Calderón y otros; mientras que en el PRD están en el mismo momentum que los azules después de la mordidota a su pastel que les dio Morena y que también ya los tiene en cuidados terminales; y, finalmente, Morena está en la etapa de crecimiento. Otros partidos pequeños, a los que Sartori llamaba “enanos” y señalaba como francamente estériles, no se pueden incluir aquí porque jamás han sido organismos políticos, nacieron y operan como negocios y eso es harina de otro costal.
SEGUNDO ACTO. ERRÁTICO. El primer semestre de la administración lopezobradorista ha sido errático. Entendemos la complejidad adicional en el arranque de todo gobierno producto de la alternancia, incluso el grado de dificultad que puede implicar la llegada por vez primera de una visión diferente a la que prevaleció durante décadas; sin embargo dichas atenuantes no sirven para explicar la ineficacia gubernamental que prevalece ni tampoco las innecesarias confrontaciones. Es el caso de la incapacidad para hacer fluir los recursos - muchos o pocos - a las dependencias, así como el abrir un frente de batalla política con los agraviados por la disolución de la policía federal. Brillan por su ausencia la operación política y la financiera.
TERCER ACTO. PRESIDENTE MODORRO. Luego de un año el Presidente sigue celebrando su triunfo electoral hasta con bailongo, aún no despierta a la realidad de gobernar un país azotado por la pobreza, sometido a la delincuencia y socialmente confrontado. Digamos que gobierna modorro. Si sigue así va a terminar atrincherado en una popularidad decreciente hasta que entregue el poder. Esperamos no sea así por el bien del país. Y no somos de sus críticos por método, de hecho compramos su oferta política y le dimos nuestro voto, pero al día de hoy el producto ni siquiera se aproxima a lo ofrecido. No se debe olvidar que en política el desencanto corre mucho más rápido que la confianza.
TRAS BAMBALINAS. VACACIONES. Nos tomaremos unos días de inmerecidas vacaciones. Nos vemos a finales de julio.
Notario Público 19 de Querétaro.
ferortiz@notaria19qro.comPRIMER ACTO. CICLO DE VIDA. La ciencia nunca miente, incluso si se aplican sus principios a los fenómenos sociales. Los partidos políticos, como “organismos sociales”, tiene su ciclo de vida igual que el de los seres vivos. Nacen, crecen, se reproducen y muren. Es el caso del PRI, partido político que como Partido Nacional Revolucionario (PNR) nació oficialmente aquí en Querétaro el 4 de marzo de 1929; creció hasta concentrar prácticamente todo el poder político del país, en un régimen de partido hegemónico que Octavio Paz calificó brillantemente como “dictablanda”; se reprodujo a partir de 1988 con el Frente Democrático Nacional que luego fue el PRD, así como en Convergencia (ahora Movimiento Ciudadano) de Dante Delgado y, en cierta forma en el PT de Alberto Anaya, el PVEM y hasta en Encuentro Social de Hugo Eric Flores; y, hoy es público y notorio que está muriendo. En el PAN, cuya evolución ha sido menos acelerada, quizá porque tardaron mucho en crecer, ya empiezan las reproducciones con Felipe Calderón y otros; mientras que en el PRD están en el mismo momentum que los azules después de la mordidota a su pastel que les dio Morena y que también ya los tiene en cuidados terminales; y, finalmente, Morena está en la etapa de crecimiento. Otros partidos pequeños, a los que Sartori llamaba “enanos” y señalaba como francamente estériles, no se pueden incluir aquí porque jamás han sido organismos políticos, nacieron y operan como negocios y eso es harina de otro costal.
SEGUNDO ACTO. ERRÁTICO. El primer semestre de la administración lopezobradorista ha sido errático. Entendemos la complejidad adicional en el arranque de todo gobierno producto de la alternancia, incluso el grado de dificultad que puede implicar la llegada por vez primera de una visión diferente a la que prevaleció durante décadas; sin embargo dichas atenuantes no sirven para explicar la ineficacia gubernamental que prevalece ni tampoco las innecesarias confrontaciones. Es el caso de la incapacidad para hacer fluir los recursos - muchos o pocos - a las dependencias, así como el abrir un frente de batalla política con los agraviados por la disolución de la policía federal. Brillan por su ausencia la operación política y la financiera.
TERCER ACTO. PRESIDENTE MODORRO. Luego de un año el Presidente sigue celebrando su triunfo electoral hasta con bailongo, aún no despierta a la realidad de gobernar un país azotado por la pobreza, sometido a la delincuencia y socialmente confrontado. Digamos que gobierna modorro. Si sigue así va a terminar atrincherado en una popularidad decreciente hasta que entregue el poder. Esperamos no sea así por el bien del país. Y no somos de sus críticos por método, de hecho compramos su oferta política y le dimos nuestro voto, pero al día de hoy el producto ni siquiera se aproxima a lo ofrecido. No se debe olvidar que en política el desencanto corre mucho más rápido que la confianza.
TRAS BAMBALINAS. VACACIONES. Nos tomaremos unos días de inmerecidas vacaciones. Nos vemos a finales de julio.
Notario Público 19 de Querétaro.
