/ miércoles 18 de julio de 2018

Expediente Q

Debacle


Varias son las debacles que ha sufrido el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en los tiempos recientes: en 2000 pierden la Presidencia de la República contra Vicente Fox y les cepillan casi todos los cargos de elección popular; en 2003 en Querétaro el panismo postulaba “ocurrencias” y hasta ganaban; con todo respeto, el inexperto Billy Herbert no sabía qué hacer en el Senado y ya después le agarró el gusto.

En 2006 los priistas nuevamente pierden la Presidencia de la República contra Felipe Calderón y Roberto Madrazo, el candidato del priismo, los deja mal parados y en la calle de la amargura; 2009 recuperan Querétaro y comienza una nueva era del priismo en la entidad, que pronto se les olvidó porque en 2012 no todo fue cuentas alegres; 2015 pierden la gubernatura y el priismo entra en crisis y la presidencia del partido por fin en asamblea queda en manos del más cercano al exgobernador José Calzada, del que muchos succionaron y hoy pocos recuerdan.

En todas las debacles recientes a Juan José Ruiz, actual presidente del PRI, le tocó ser oposición, solamente con el triunfo del 2009 disfrutó y convivió de cerca al poder, pero en 2012 electoralmente sufrió un descalabro que sus detractores quieren aprovechar para denostarlo; en el proceso electoral del 2017-2018 Juan José Ruiz, no entregó las cuentas que sus opositores querían, porque no lograron ninguna candidatura y lo quieren tumbar de la dirigencia y de la regiduría, que casi tiene en la bolsa, una vez que concluyan los procesos legales de impugnaciones.

Desde el 2000 que el PRI cayó en desgracia, los principales detractores del JJ Marco Antonio León Hernández y Jesús Rodríguez, no les pasó absolutamente nada, al contrario fue cuando mejor les fue, cohabitando con los gobiernos de Acción Nacional, dóciles y entregados al poder, los anteriores personajes nunca conocieron lo que fue sufrir en la oposición, sino todo lo contrario.

Hoy pretenden nuevamente quedarse con lo que queda el PRI siendo tercera fuerza política en el estado (Ya lo fue) no es cosa nueva para los priistas pero el JJ tiene a dos enemigos en casa, que no lo dejarán descansar hasta que algo saquen de su rabieta, ya se la saben y así han actuado siempre.

El PRI debería de estar preocupado por reconstruirse en Querétaro, pero le será difícil mientras los dinosaurios locales, no lo permitan porque traen también a “baby dinos” haciéndole al opositor.

DE REBOTE

Son las vacaciones de verano, es la resaca electoral, la debacle mundialista o cualquier otra cosa, pero en el municipio de Querétaro no saben qué hacer para nadar de muertito y olvidarse de las actividades relevantes, piden por favor que ya acabe esto.

contacto@adanolvera.com

@adanolverar

Debacle


Varias son las debacles que ha sufrido el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en los tiempos recientes: en 2000 pierden la Presidencia de la República contra Vicente Fox y les cepillan casi todos los cargos de elección popular; en 2003 en Querétaro el panismo postulaba “ocurrencias” y hasta ganaban; con todo respeto, el inexperto Billy Herbert no sabía qué hacer en el Senado y ya después le agarró el gusto.

En 2006 los priistas nuevamente pierden la Presidencia de la República contra Felipe Calderón y Roberto Madrazo, el candidato del priismo, los deja mal parados y en la calle de la amargura; 2009 recuperan Querétaro y comienza una nueva era del priismo en la entidad, que pronto se les olvidó porque en 2012 no todo fue cuentas alegres; 2015 pierden la gubernatura y el priismo entra en crisis y la presidencia del partido por fin en asamblea queda en manos del más cercano al exgobernador José Calzada, del que muchos succionaron y hoy pocos recuerdan.

En todas las debacles recientes a Juan José Ruiz, actual presidente del PRI, le tocó ser oposición, solamente con el triunfo del 2009 disfrutó y convivió de cerca al poder, pero en 2012 electoralmente sufrió un descalabro que sus detractores quieren aprovechar para denostarlo; en el proceso electoral del 2017-2018 Juan José Ruiz, no entregó las cuentas que sus opositores querían, porque no lograron ninguna candidatura y lo quieren tumbar de la dirigencia y de la regiduría, que casi tiene en la bolsa, una vez que concluyan los procesos legales de impugnaciones.

Desde el 2000 que el PRI cayó en desgracia, los principales detractores del JJ Marco Antonio León Hernández y Jesús Rodríguez, no les pasó absolutamente nada, al contrario fue cuando mejor les fue, cohabitando con los gobiernos de Acción Nacional, dóciles y entregados al poder, los anteriores personajes nunca conocieron lo que fue sufrir en la oposición, sino todo lo contrario.

Hoy pretenden nuevamente quedarse con lo que queda el PRI siendo tercera fuerza política en el estado (Ya lo fue) no es cosa nueva para los priistas pero el JJ tiene a dos enemigos en casa, que no lo dejarán descansar hasta que algo saquen de su rabieta, ya se la saben y así han actuado siempre.

El PRI debería de estar preocupado por reconstruirse en Querétaro, pero le será difícil mientras los dinosaurios locales, no lo permitan porque traen también a “baby dinos” haciéndole al opositor.

DE REBOTE

Son las vacaciones de verano, es la resaca electoral, la debacle mundialista o cualquier otra cosa, pero en el municipio de Querétaro no saben qué hacer para nadar de muertito y olvidarse de las actividades relevantes, piden por favor que ya acabe esto.

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