Con la pandemia afloran los problemas y en temas de salud más. Desde hace algunos meses en Querétaro, la secretaría de salud que encabeza Julio Cesar Ramírez Argüello y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) sección 32, que encabeza Silvia Rivera Hernández, libran desencuentros de todo tipo y casi todo tiene que ver con las formas.
Según los dichos de Silvia Rivera, hay poca honestidad hacia la ciudadanía sobre la realidad de Querétaro en materia de salud, dice la dirigente que la población debe saber la realidad; recordemos que desde hace algunos meses la dirigente asegura que la capacidad hospitalaria está rebasada en Querétaro, asunto que las autoridades niegan de manera categórica.
Asegura la dirigente que hay falta de personal especializado para atender la pandemia de Covid-19. Las diferencias entre la autoridad y la representación sindical son marcadas y justo en tiempos tan complicados.
La comparecencia del secretario de salud ante diputados por la glosa del quinto informe de gobierno, se tornó difícil para Ramírez Arguello, tuvo que ser rescatado por legisladores panistas, que evitaron le dieran una buena repasada.
Los legisladores de oposición tendrán mucho tema para criticar con propuestas importantes, ya que solamente exhibir los desatinos que ha tenido el secretario no servirá de mucho, cuando lo que se busca es mejorar un sistema de salud en un país que poco le invirtió durante años al tema.
Por cierto, los legisladores deberían de impulsar e invitar al gobierno federal a equipar el nuevo Hospital General de Querétaro, que está prácticamente listo en su obra civil, pero sin recursos para equipamiento.
De rebote
Bloquean a influencers de tierras de Conin y además a los “troll” que quieran meter ruido en el proceso de elección de rectora (o) de la UAQ. Puede ser un ejemplo importante en el 2021 para la constitucional, los sin rostro se quedarían sin “empleo”.
@adanolverar
