Mientras el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, en su discurso inaugural elogió el trabajo en equipo para construir obras en favor de los más necesitados, poniendo de ejemplo como a la “limón” se puede trabajar en faenas especiales, como construir y equipar un hospital que es ejemplo nacional y que servirá también para preparar a nuevas generaciones de médicos.
En el exterior del hospital grupos de ciudadanos, se enfrentan a gritos unos en contra y otros a favor del presidente Andrés Manuel López Obrador, con ánimos polarizados como si la inauguración de la obra fuera mitin de campaña los gritantes se decían de todo para defender sus posturas.
El discreto pero eficiente cerco de seguridad impidió que los manifestantes se metieran a las nuevas instalaciones en la zona de Jardines de la Hacienda, los simpatizantes de López Obrador y los opositores se desgañitaba mientras adentro todo fue cordialidad y política de altura; afuera lo primitivo y lo básico como suele suceder.
Los cierres de calles ahora fueron de los eternos manifestantes, que no saben como treparse al tren para permanecer vigentes, el siempre oportuno Pablo “Marchas Loyola, deslució en tránsito vehicular de la zona durante casi una hora, quería hacerse notar y no estaba en sintonía con los gritantes de la puerta principal. En su tema.
Una pequeña muestra de lo que viene en la elección y campañas de abril donde las posturas se radicalizaron entre el pueblo bueno y los conservadores así como se ha etiquetado a los habitantes de México; ojalá y los mensajes de odio no estén por encima de la cordura que debemos de guardar todos los ciudadanos.
De rebote
Un módulo de la Secretaría de Bienestar, justo frente a los manifestantes, con servidores de la nación que aprovecharon la ocasión para hacerse presentes con todo y souvenirs.
@adanolverar