/ viernes 26 de marzo de 2021

Humanitas. Arte y Pasión

Satori es una palabra japonesa que designa la iluminación repentina que puede salvarnos de la memoria, de los recuerdos del pasado, así como del porvenir. Es donde solo existe el presente, es el momento de la comprensión, o de la iluminación para el budismo zen.

Cualquier persona puede experimentar un Satori, como un acontecimiento en donde se revela el ser, salir de uno mismo, una experiencia inefable, numinosa, un misterio tremendo y fascinante, es decir, que no puede ser explicado con solo palabras.

Recordemos que Santa Teresa de Ávila intenta explicar en su texto autobiográfico “Libro de la Vida” el misterio de la transverberación, que puede ser un ejemplo de un Satori de corporalidad virtual, en donde dice: “Vía a un ángel cabe mi hacia el lado izquierdo en forma corporal, lo que no suelo ver sino por maravilla...Víale en las manos un dardo de oro largo, y al fin de hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces…y que me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía que las llevaba consigo y me dejaba toda abrazada en amor grande de Dios”. Esta condición poética-mística de Santa Teresa nos enseña que la experiencia del Satori, es una conexión de cuerpo, mente y el espíritu como navegantes en un mundo virtual.

El gran Artista barroco Gian Lorenzo Bernini en el siglo XVII interpretó el acontecimiento virtual y lo llevó al mármol expresando el instante en el que la santa esta fuera de sí, sosteniendo la experiencia numinosa. La obra se encuentra en Santa maría de la Victoria en Roma.

Los relatos extraordinarios como los mitos, el génesis o el apocalipsis, son ideas que habitan en la mente y la cultura desde hace más de dos mil años. Hemos construido universos virtuales para trascender a otra vida, estos universos son un ejemplo de la virtualidad en la imaginación colectiva, que además cuando es ligada a la religiosidad se activa de manera que nos hacen perder la noción del tiempo-espacio y por supuesto de lo lógico-racional.

En este sentido otro concepto interesante del budismo que nos lleva a la comprensión, a pensar de otra manera las cosas, son los” Koan”, estos suelen ser problemas o aporías, que los monjes maestros aplican a sus estudiantes para saber si han avanzado.

El Koan es una pregunta o respuesta aparentemente sin sentido que instan al estudiante a salir del pensamiento lógico-racional, para comprender y dotar de nuevos sentidos a las cosas y los conceptos.

Hay un interesante ejemplo en el pensador francés Blaise Pascal, que parece que practica esto cuando nos dice: “Consuélate, no me buscarías si no me hubieras encontrado”

A un maestro Zen un alumno le pregunta con humildad: ¿Maestro que es el Zen? Y el anciano maestro le responde: es como un ciprés en el patio.

“El arte salvará al mundo”.


bobiglez@gmail.com

Satori es una palabra japonesa que designa la iluminación repentina que puede salvarnos de la memoria, de los recuerdos del pasado, así como del porvenir. Es donde solo existe el presente, es el momento de la comprensión, o de la iluminación para el budismo zen.

Cualquier persona puede experimentar un Satori, como un acontecimiento en donde se revela el ser, salir de uno mismo, una experiencia inefable, numinosa, un misterio tremendo y fascinante, es decir, que no puede ser explicado con solo palabras.

Recordemos que Santa Teresa de Ávila intenta explicar en su texto autobiográfico “Libro de la Vida” el misterio de la transverberación, que puede ser un ejemplo de un Satori de corporalidad virtual, en donde dice: “Vía a un ángel cabe mi hacia el lado izquierdo en forma corporal, lo que no suelo ver sino por maravilla...Víale en las manos un dardo de oro largo, y al fin de hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces…y que me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía que las llevaba consigo y me dejaba toda abrazada en amor grande de Dios”. Esta condición poética-mística de Santa Teresa nos enseña que la experiencia del Satori, es una conexión de cuerpo, mente y el espíritu como navegantes en un mundo virtual.

El gran Artista barroco Gian Lorenzo Bernini en el siglo XVII interpretó el acontecimiento virtual y lo llevó al mármol expresando el instante en el que la santa esta fuera de sí, sosteniendo la experiencia numinosa. La obra se encuentra en Santa maría de la Victoria en Roma.

Los relatos extraordinarios como los mitos, el génesis o el apocalipsis, son ideas que habitan en la mente y la cultura desde hace más de dos mil años. Hemos construido universos virtuales para trascender a otra vida, estos universos son un ejemplo de la virtualidad en la imaginación colectiva, que además cuando es ligada a la religiosidad se activa de manera que nos hacen perder la noción del tiempo-espacio y por supuesto de lo lógico-racional.

En este sentido otro concepto interesante del budismo que nos lleva a la comprensión, a pensar de otra manera las cosas, son los” Koan”, estos suelen ser problemas o aporías, que los monjes maestros aplican a sus estudiantes para saber si han avanzado.

El Koan es una pregunta o respuesta aparentemente sin sentido que instan al estudiante a salir del pensamiento lógico-racional, para comprender y dotar de nuevos sentidos a las cosas y los conceptos.

Hay un interesante ejemplo en el pensador francés Blaise Pascal, que parece que practica esto cuando nos dice: “Consuélate, no me buscarías si no me hubieras encontrado”

A un maestro Zen un alumno le pregunta con humildad: ¿Maestro que es el Zen? Y el anciano maestro le responde: es como un ciprés en el patio.

“El arte salvará al mundo”.


bobiglez@gmail.com