Lo conocí en la primavera de 1998 en la Sala de libros raros de la Biblioteca Nettie Lee Benson de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Texas en Austin. Me lo presentó el Dr. Peter Ward Director del Centro de estudios mexicanos. Uno de los motivos de su estadía era si estaba interesado en donar o vender su archivo personal a la Biblioteca más importante de México en los Estados Unidos de America. Se realizó una cena de gala en su honor en el Archivo, Biblioteca y Museo Presidencial Lyndon B. Jhonson.. Dialogamos sobre el diplomático queretano Ezequiel Montes Ledezma, y al año siguiente el ex embajador de México en Francia recibió la presea del jurisconsulto Ezequiel Montes en el Teatro de la República. En 2008 la Universidad Autónoma de Querétaro le otorgó el grado de Doctor Honoris Causa.
De hecho desde 1995, la Biblioteca de la Universidad de Princeton empezó el resguardo de sus documentos personales en la colección llamada Carlos Fuentes Papers, consta de 10 colecciones distintas de documentos, divididas en cuadernos manuscritos originales, dibujos, bocetos. Carlos Fuentes solía dibujar caricaturas de sus amigos en servilletas y hojas sueltas, apuntes correspondencia con decenas de personas como el empresario Manuel Arango, el escritor Albert Camius, Octavo Paz, la editora Carmen Balcells y políticos como Luis Echeverría y Carlos Salinas dé Gortari, que se extienden desde su juventud hasta el 2000.
La colección que consta de 192 cajas de todos tamaños contiene manuscritos de obras como Gringo Viejo y quizá la joya de la colección los cuadernos donde escribió entre 1955 y 1958 el original de su novela, la Región más Transparente.
Esta Colección invaluable tiene ciertas restricciones la correspondencia sostenida por Fuentes con una lista de personajes entre los que se encuentran Guillermo Cabrera Infante, Norman Mailler, Octavio Paz, Gabriel García Márquez, quedan bajo un embargo que no se podrá romper hasta el 16 de mayo de 2014 cuando se cumplan dos años de su fallecimiento.
A una década de su muerte, ahora biógrafos e investigadores podrán acceder a estos archivos, residentes en la Biblioteca Firestone del campus de la Universidad de Princeton y aportar con sus publicaciones importantes datos sobre la vida y obra de uno de los más grandes escritores de México en el mundo.
