Pese a la fuerte difusión que dieron los medios de comunicación de la región y redes sociales sobre el problema de salud pública con motivo del Dengue, no se dio el cuidado y prevención necesario para evitar, por ejemplo la primera defunción por Dengue hemorrágico en la región serrana, particularmente en Purísima de Arista, Arroyo Seco, Querétaro.
Aunque se sabe que se hicieron esfuerzos para tratar de medio controlar el vector que infecta de la gente, en la realidad pareciera que se subestimo el problema, incluso todo hace indicar que la confianza se hizo irresponsabilidad.
Ningún nivel de gobierno, ninguno tuvo la suficiente atención a este problema que pone en riesgo a la población más vulnerable de la zona norte del estado, como son niños y personas de la tercera edad.
La Pandemia del Covid-19, sumado al tema del Dengue y el inevitable efecto de la próxima temporada por la influenza dejan un amargo sabor de boca ante la opaca intervención de las autoridades del sector salud.
La región serrana no puede ni debe seguir siendo el patio trasero de la política pública, y mucho menos debe seguir siendo únicamente foco de atención en los ciclos electorales de compra de votos.
