Entre los elementos que forman parte de la festividad del Día de Muertos está el altar que en diferentes estilos se coloca en los hogares en recuerdo de quienes han partido de este mundo, con simbólicos objetos que los conforman entre los que se destaca la foto del difunto, su comida y bebida preferidas y objetos personales, enmarcado entre papel picado, flores, velas y artículos religiosos entre otros adornos.
En el marco de esta festividad el grupo “Mujeres, Hablemos fuerte” de Tequisquiapan, aprovechó la ocasión para honrar la memoria de víctimas de feminicidio a través de un altar que colocaron en el jardín del centro, en el que se aprecian varias cruces que “representan a cada víctima, a las cuales decidimos honrar su memoria y en sororidad con ellas las recordamos diciendo todas, ¡Mujeres, hablemos fuerte!”
El altar se aprecia en dos niveles con varios elementos, entre éstos: una cruz blanca que sirve para purificar el espíritu de las mujeres muertas y liberarlas de sus culpas pendientes, explicaron, además de sal y cal que simboliza la purificación del altar, alimentos y bebidas, veladoras que les sirva como luz y guie al espíritu en su viaje, incienso, pétalos de flores amarillas, flores moradas, y flores en maceta “mujeres vivas que contarán la historia de sus hermanas muertas”.
Quienes se dieron a la tarea de colocar el simbólico altar y así honrar a las víctimas de feminicidio, fueron: Leonor Ana Muñoz, Karla Sugey González, Nathalie N. Monter, Vianney Lara, Jorge Patio, Eugenia López, Norberto Nieto, Araceli Fabián, María Elena López, Ma. Cruz Flores y María Eugenia Ferro Escalante.
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