Considerados en la jardinería como la diva de las flores, las rosas requieres algunos cuidados específicos para que luzcan espectaculares como menciona Ángeles Becerra especialista en su cuidado; la experta refiere que es en otoño cuando deben transplantarse para que en primavera ya estén bien enraizados ya que su floración es hasta comienzos de octubre.
Como buena planta leñosa, el rosal necesita las oscilaciones de temperatura propias del otoño para poder arraigar por lo que lo ideal es que pospongamos su plantación definitiva hasta la llegada de la próxima estación.
PODA
Aunque puede parecer algo secundario, el hecho de retirar las rosas una vez marchitas no solo ayudará a la planta a contar con más energía sino, sobre todo, será un apoyo para estimular la floración. Lejos de hacer una poda invasiva, bastará con cortar desde el tallo a unos tres centímetros de la flor.
De esta forma, estaremos eliminando una parte muerta de la planta y favoreciendo que se generen nuevas flores.
APLICAR RIEGO ABUNDANTE Y EN PROFUNDIDAD
Si bien los meses de calor son los mejores para esta planta, lo cierto es que es una de las que más se resiente, por este motivo, es importante que cuente con un riego regular, abundante y en profundidad, o lo que es lo mismo, dejando que el agua empape sin prisa sus raíces hasta hidratarla por completo.
A pesar de esta necesidad de agua, es importante elegir correctamente el momento del riego concentrándolo en las primeras horas del día o en las últimas de la tarde
ABONO ESPECÍFICO PARA ROSALES
Aunque lo ideal es suministrar este abono durante los meses de primavera, también se recomienda hacerlo con menor intensidad en verano. Aportar nutrientes a la planta facilitará que cuente con la energía que necesita para el desgaste de la floración
CONTROL DE PLAGAS
Es importante esta parte para tener un rosal sano ya que durante el verano es un auténtico imán de algunas de las plagas más habituales del verano, aunque son el pulgón y la mosca blanca dos de sus mayores enemigos. En rosales que han sido abonados en primavera, el ataque de estos insectos dará cierto margen de reacción, aunque no conviene confiarse e, igualmente, se tendrá que poner solución lo antes posible, con productos específicos para matar la plaga desde la raíz.