Los pacientes que requieren trasplante de riñón, hígado y córnea, cada vez son más jóvenes, alertó la directora general del Centro Estatal de Trasplantes del Estado de Querétaro, Rosario Hernández Vargas, quien atribuyó a la mala alimentación dicho problema de salud.
Indicó que desde hace varios años se ha identificado la necesidad de trasplantar a pacientes cada vez más jóvenes, edades que oscilan entre los 24 años de edad, adicional a la etapa crítica que ya vivieron para llegar a este final.
“De 24 a 48 años de edad, son las edades que repuntan en la necesidad de un trasplante, desgraciadamente los jóvenes cada vez están incrementado en esta lista de espera, desconocemos la causa, seguramente es la alimentación, la manera de vivir de ahora, hay muchos contaminantes que antes no considerábamos y esto ha repuntado de la necesidad en los jóvenes”.
Las instancias de salud se mantienen continuamente impulsando programas de salud las cuales van encaminadas a la prevención de diversos padecimientos, pero es necesaria una mayor participación de la población para evitar llegar a esta necesidad de un trasplante, por ello recomendó evitar malas prácticas alimenticias ya que son los principales factores.
Agregó que los hábitos alimenticios son fundamentales para evitar desarrollar enfermedades crónico degenerativas, mismas que ocasionan riesgos mayores para los trasplantes, por ello exhortó a la ciudadanía mantener un buen apego en el consumo de alimentos ricos en vitaminas y proteínas así como el consumo de agua.