La exhacienda de La Lira, en el municipio de Pedro Escobedo, es una de las mejor conservadas y de gran belleza; resaltan sus muros blancos combinados con cantera, amplia y pesada construcción que enmarca el camino de acceso y da la bienvenida a la comunidad del mismo nombre.
De acuerdo con información proporcionada por la Dirección de Desarrollo Turístico Municipal, se cree que este sitio estuvo remotamente ocupado por otomíes. También se piensa que debe su nombre a Ana de Lira, nombre que se menciona en un contrato de compraventa que data de 1648.
En 1593 inició la construcción de la ex hacienda, obra culminada por el arquitecto, Eduardo Tres Guerras, originario de Celaya, Guanajuato. En 1793, el Conde de Revillagigedo, pide un informe al delegado de San Juan del Río, Pedro Martínez de Salazar y Pacheco, sobre el estado en el que se encontraban las haciendas de La Llave y La Lira.
El informe debía contener el estado físico, topográfico y económico de las haciendas, interés que provenía, no sólo por ser dos de las más bellas de la entonces jurisdicción de San Juan del Río, sino también por la calidad de sus tierras.
La ex hacienda La Lira ha sido remodelada en varias ocasiones, pero conserva su esencia y es orgullo de los habitantes de la comunidad que se despliega a sus alrededores.
