Joe Burrow, el joven mariscal de campo de los Cincinnati Bengals, aspira a ganarse con apenas 25 años de edad un lugar en el paseo de la fama de Hollywood cuando enfrente el domingo a los locales Los Angeles Rams en el primer Super Bowl de su corta carrera.
"Tienes que aprovechar tus oportunidades cuando llegan", dijo Burrow, artífice del arribo de la franquicia de Ohio a su primera disputa del título de la NFL desde 1989. "Ves muchachos que pasan toda su carrera sin llegar al Super Bowl, y cuando llegas aquí, tienes que aprovechar esas oportunidades", insistió.
Ganador del trofeo Heisman del football americano a nivel universitario, Burrow, en apenas su segunda temporada en la NFL, llega al Super Bowl después de recuperarse de una campaña de novato interrumpida el año pasado por una devastadora lesión en la rodilla.
En los playoffs, Burrow mostró sus garras al llevar a los Bengals a victorias como visitantes sobre los principales sembrados, como Los 'Titanes' de Tennessee y los poderosos Chiefs de Kansas City, estos últimos se vieron impedidos de llegar a su tercer Super Bowl consecutivo, ya que habían ganado en el 2020 y cayeron ante Tampa en el 2021.
Otra victoria el domingo en el Super Bowl completaría un cambio notable para los 'bengalíes', que hace solo dos temporadas terminaron con un récord negativo de 2-14.
Mientras que la narrativa que rodea a los Bengals tiene todas las características de un éxito de taquilla, Burrow asegura que su atención está fijada únicamente en el juego del domingo.
"Me he centrado únicamente en la preparación del juego y en tratar de eliminar tantas distracciones como pueda. Con un Super Bowl en Los Angeles, todo el mundo tiene distracciones y podrías ser arrastrado en diferentes direcciones", reconoció.
"El equipo que maneje mejor esas distracciones terminará ganando el juego", subrayó el joven quarterback.
Mentalidad de acero
Esa es la mentalidad de acero que ha caracterizado el juego de Burrow a lo largo de la postemporada. Con un Super Bowl a menos de una semana, el astro bengalí dijo que está decidido a aprovechar la oportunidad que se le presenta.
Los Bengals perdieron sus dos apariciones previas en el Super Bowl en 1989 y 1982, y hasta esta temporada no habían ganado un partido de playoffs en más de 30 años, la sequía más larga en la NFL.
Burrow, también oriundo de Ohio, admite que se enorgullece de poder darle a los fanáticos de los Bengals algo por lo que puedan alegrarse.
"Ser de Ohio y ser el mariscal de campo de los Bengals es algo de lo que estoy muy orgulloso", ratificó. "Al crecer allí, realmente no había muchos fanáticos de los Bengals en la escuela secundaria. Todos eran Steelers y Browns. Hubo algunos fanáticos de los Bengals aquí y allá de los que se burlaron".
"Entonces, como equipo, estamos emocionados de poder poner un producto en el campo del que los fanáticos estén orgullosos", concluyó.
