Rennes, Francia | AFP.- Tres pescadores furtivos españoles fueron detenidos el martes en la región francesa de Morbihan (noroeste) con 110 kilos de percebes, un crustáceo muy apreciado en el mercado español, cuando llegaban a puerto, anunció el jueves la prefectura de Morbihan en un comunicado.
La fiscalía de Vannes investiga el caso y los tres españoles "podrían ser condenados a una multa de 22.500 euros, la confiscación de su vehículo y la embarcación", precisa la prefectura.
En España, el precio del percebe puede alcanzar los 200 euros/kg en la carta de los restaurantes. "Desde hace varios años, un importante tráfico existe entre Francia y ese" país, subrayó la prefectura.
La pesca del percebe está muy reglamentada en Francia.
En la región de Morbihan es autorizada unos días por mes como actividad recreativa, desde el amanecer al atardecer y por cantidades limitadas a tres kilos por pescador, señaló la prefectura.
"Los servicios del Estado y los profesionales están plenamente movilizados" para proteger de este recurso, concluyó el comunicado.
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