El Cónsul Honorario de Alemania en Querétaro, Georg Christoph Bauer recordó anécdotas y detalles de cómo se dio la construcción del Estadio Corregidora de Querétaro, que fue la casa de la selección teutona en el mundial de 1986, además dio a conocer como inicio el apoyo de este representativo alemán a los niños y jóvenes que más lo necesitan en nuestra entidad desde aquellos tiempos.
Christoph Bauer recordó que antes de que se definiera que México sería la sede del mundial de 1986, Alemania analizó las posibilidades luego de los países como Brasil, Argentina y desde luego México eran los candidatos, pero el entonces embajador de ese país en México cuestionó si Querétaro podría tener un estadio con capacidad suficiente, el cual en ese momento no existía.
El gobernador del estado en aquel momento, Rafael Camacho Guzmán le ofreció en un convivio a Bauer, construir un estadio que fungiera como sede de la selección alemana en el mundial de 1986, por lo que al día siguiente se reunieron en Palacio de Gobierno junto con el embajador de Alemania en México, donde se hizo el planteamiento de manera formal en que el gobierno de Querétaro aportaría 30 millones de dólares y Alemania a través de la FIFA otros 30 millones de dólares.
“Una vez decidido con Rafael Camacho que se haría el estadio, la siguiente pregunta era como querían los alemanes su estadio, entonces en una reunión en el hotel Nikko en avenida Reforma de la Ciudad de México, estaba Beckenbauer, Rudy Feller, Hermann Neuberger (líder de la delegación alemana) Briegel, Matthäus, en esa reunión entra el gobernador Rafael Camacho Guzmán, saluda al embajador y le dice de estos que están aquí quien es el mandamás porque nada más trato con uno, se levanta Hermann Neuberger, y el gobernador preguntó cómo querían el estadio, entonces sacaron una postal del estadio de Frankfurt donde están las oficinas del Deutscher Fußball-Bund de la Asociación de futbol profesional, el gobernador solo dijo “hecho”, ahí terminó la junta y se fue y ahí está el estadio”.
El Cónsul Honorario de Alemania en Querétaro, recordó que el día de la inauguración del estadio, el 5 de febrero de 1985, acudió acompañado del embajador Doctor Dieckmann, sin embargo, en el palco presidencial se les impidió el acceso, debido a que el entonces gobernador, Mariano Palacios consideró que eran personas no gratas en Querétaro, el motivo fue que las esposas de los jugadores alemanes conocieron en Querétaro lugares donde personas en situación vulnerable requerían ayuda y solicitaron a la selección apoyar con recursos económicos, situación que desaprobó la esposa del gobernador y presidenta del DIF.
Pese a esta situación, desde ese tiempo, la selección de futbol alemana brinda su apoyo económico permanente a instituciones como el Oasis del Niño que recibió un primer cheque por 5 mil marcos alemanes, o la compra de un terreno en Corregidora donde se construyó Pan de Vida, el cual brinda ayuda a niños en situación de calle, entre otros apoyos en beneficio de la niñez y juventud queretana.