Uno de los principales malestares que actualmente presentan la población de cualquier edad es la de los espasmos en los ojos, o mejor conocidos con la frase de "me brinca el ojo", y esto se puede asociar a diferentes factores como problemas en el trabajo, estrés, poca solvencia económica y preocupaciones en general.
Así lo dio a conocer la médico familiar, Valeria Hernández Martínez, quien comentó que entre los estudiantes también ha sido recurrente este síntoma, sobre todo después de la pandemia por el Covid-19, aunque reconoció que hay diferentes alternativas para poder tratarlo.
Subrayó que, aunque hay medicamentos, lo mejor es hacer cambios en el modo de vida, así como establecer algunas actividades físicas o de recreación para tener días más llevaderos.
"Hablar de medicamentos es muy fácil, la gente se puede medicar y venir con nosotros como especialistas, pero lo más recomendable es hacer cambios de rutina, salir a caminar y distraerse".
Señaló que la pandemia también trajo consigo el hecho de la poca solvencia económica, factor por el cual he llegado múltiples pacientes, y que se registra en muchas ocasiones enrojecimiento, hinchazón y secreción ocular, también, que los espasmos persisten durante más de una semana, pero que hay casos en los que se complica cerrar el párpado al 100%.
La especialista en salud recalcó que, en múltiples ocasiones, también tiene que ver con el excesivo consumo de alcohol y la cafeína y que ellos como médicos recomiendan hacer ligeros masajes, sobre todo en la noche, para poder obtener un descanso más eficiente.
PACIENTE
Jacinto Domínguez comentó que él tiene varios años padeciendo esta enfermedad, en la que incluso se le catalogó como un tic nervioso, toda vez que, durante 25 años, trabajó en el tercer turno de una empresa y que esto le reducía el tiempo para dormir y en ocasiones doblaba turnos, cuestión que acrecentó su mal.
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Detalló que actualmente se trata con medicina natural y que aprovecha por lo menos una vez al mes para ir a los temascales y poder relajarse, aunque resaltó que su carácter se hizo más irritable.
"Uno con los años se hace más enojón y, aunque me estoy tratando la brincadera de mi ojo, no es fácil porque uno ha tenido una vida complicada y tenemos que trabajar", añadió.
