De visita en San Juan del Río, el secretario general del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Acción Nacional (PAN) en Querétaro, Martín Arango García, informó que de manera directa no ha tenido conocimiento respecto de los deseos de Francisco Dominguez Serviñen por competir por la dirigencia nacional del blanquiazul, sin embargo, señaló que el modelo queretano de trabajo si puede replicarse a nivel nacional.
Explicó que para el caso del PAN Querétaro se ha encontrado una buena fórmula para impulsar su posicionamiento, donde la clave es propiciar el diálogo y los consensos, así como respetar la palabra, resaltando que el modelo de Querétaro es de conciliación, donde los grupos quedan de lado y se privilegia el interés de la institución por encima del personal.
Aspecto que, dijo, quedó de manifiesto en las pasadas elecciones, donde la entidad fue la que mayores márgenes de distancia registró en el triunfo del gobernador electo, no obstante, mencionó que si bien a nivel nacional se logró remontar muchas posiciones, no se trata de un escenario para celebrar, ni echar las campanas al vuelo, sino para encontrar esa ruta de trabajo que permitan incrementar la presencia del partido en el territorio nacional.
“Creo que tendremos que trabajar de manera muy intensa, porque el Partido Acción Nacional que merecen los ciudadanos, es un partido que debe de tener mayor presencia”, señaló al tiempo de recalcar que la evaluación final la tendrán que tomar en consenso todos los actores políticos que integran al panismo, pero recalcó que esto se logrará mediante el diálogo y la unidad.
Por último, Arango García mencionó que el pasado fin de semana el Comité Ejecutivo Nacional designó a la Comisión Electoral que va a regir el proceso de elección de la nueva dirigencia tanto nacional como estatales y que tras los procesos internos, emitirá la combinatoria correspondiente, misma que deberá indicar los días, plazos y requisitos para las renovaciones y concluyó señalando que respetando la encomienda que hoy tiene al estar dentro de la dirigencia estatal, se mantendrá ajeno al proceso de elección y con absoluta neutralidad.
