La plaga de moscas y los malos olores que se perciben en el ambiente en Laguna de Lourdes, es una situación que ha mermado la calidad de vida y que representa un riesgo para la salud de los pobladores. Esta problemática es provocada por un establo de vacas lecheras ubicado en la entrada de la comunidad y que es propiedad de una empresa nacional de lácteos, denunciaron habitantes de dicha localidad.
Aseveraron que la proliferación de moscas inició hace aproximadamente tres años, con la instalación de este establo en la comunidad. Desde entonces, afirmaron, la plaga de insectos se ha esparcido por toda la comunidad y localidades vecinas lo cual ha provocado molestias en las familias que allí habitan, así como la alerta por las posibles enfermedades que pudieran causar.
Incluso, madres de familia de la escuela primaria “Niños Héroes” mencionaron que la plaga de moscas ha llegado hasta las instalaciones de la institución educativa, lo cual, apuntaron, es un factor de riesgo ya que los insectos rondan por el ambiente al momento de que los menores de edad consumen sus alimentos durante el receso.
“En la escuela ya tenemos este problema muy grave porque cuando los niños salen a comer luego hay muchas moscas que se paran en sus comidas y pues con esto los niños son los que se pueden perjudicar más, porque cuántas cosas no traen esas moscas (…). Es un mosquerío, ya no hayamos ni qué hacer con estas moscas, por más que reguemos con cloro aquí siguen”, subrayó.
Indicaron que si bien la empresa nacional de lácteos realizaba fumigaciones al interior de la comunidad, desde hace tres meses no se cuenta con este apoyo. Explicaron que durante este periodo las únicas zonas que se fumigan son en el predio del establo y en el perímetro del mismo.
“No vamos contra la empresa porque de ahí son varios trabajadores de aquí, pero si queremos que controle esto. Necesitamos que se haga algo para garantizar la salud de todos, principalmente de los niños”, dijo una madre de familia.
Sobre los malos olores, explicaron que durante el día se perciben tufos de excremento de ganado y de animales muertos, pues, afirmaron, un sector de este establo es empleado como tiradero de vísceras y de los animales que mueren en el sitio. Aseguraron que esta última situación ha provocado también la proliferación de ratas en esta zona de la comunidad.
“Hay ratas engordándose ahí donde está ese tiradero, donde van a tirar todas las vacas que se mueren (…). Hasta animales carroñeros llegan hasta aquel rincón. En las mañana y en las tardes salen unos olores que no se pueden soportar. En cuanto empieza el sol a calentar no se aguanta el olor que hay aquí. La verdad es una situación que nos ha invadido y que resulta muy incómoda para la comunidad”, mencionó una vecina.