Durante las primeras horas del día un grupo de personas fueron desalojadas de un predio presuntamente invadido al pie de la carretera 431, en San Fandila, Pedro Escobedo, tras dichas acciones, se apersonaron en las instalaciones de la presidencia municipal, donde exigieron se explicara la intervención de la autoridad, sin embargo, al no tener respuesta, bloquearon la carretera México-Querétaro en ambas direcciones.
A casi dos horas del corte a la circulación, fueron desalojados por un grupo antimotines de la Secretaría de Seguridad Ciudadana permitiendo el paso de los vehículos, tema ante el que la Secretaría de gobierno del estado informó mediante comunicado de prensa que “este operativo contó en todo momento con el acompañamiento de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro, para garantizar los derechos de todas las personas involucradas”.
Dicho escenario se suscitó debido a que durante la madrugada, un grupo de elementos de seguridad estatal y municipal llegaron al terreno en disputa para desalojar a casi sesenta personas que se encontraban en el lugar, presuntamente lo hacían de manera irregular.
Luego de dichas acciones acudieron en un primer término a la carretera para quemar llantas y cerrarla, pero poco después, se fueron a la presidencia municipal, donde bloquearon las entradas hasta que llegó la secretaria de gobierno.
Fue Griselda Santiago quien les indició: “Nosotros nuestro actuar está respaldado por una solicitud de apoyo que hacen de alguna manera los diferentes entes que administran justicia, pero las órdenes de desalojo quien las emite y las tiene es directamente la fiscalía”.
En ese momento los quejosos pidieron ver algún documento donde se comprobará que la orden estaba dentro de la ley, pero como no se tenía a la mano dicho documento decidieron irse a la carretera para bloquearla.
Tras el cierre acudió el personal de desarrollo político de gobierno del estado para hablar con ellos y conciliar que se reabriera la carretera, al no tener una respuesta se pidió el apoyo del grupo antimotines.
Fue así que a casi dos horas de haber cerrado la vía de comunicación dicho despliegue de autoridades se dio en el punto, y entre jaloneos y empujones se reabrió nuevamente la carretera en ambas direcciones, a los pocos minutos también llegó personal de grupo antimotines la Guardia Nacional.
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Fueron varios kilómetros de vehículos que esperaban el paso, en una de las arterias más transitadas del país, de manera que se reanudó el tránsito vehicular e iniciando con ello un proceso de negociación con los manifestantes, con el objetivo de disuadirlos para evitar más conflictos.
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