Una vez más se registró fuerte derrame de combustible de una toma clandestina reabierta en tres ocasiones por los “chupaductos”, en las inmediaciones de las comunidades de Santa Matilde y El Carrizo, incidente descubierto la mañana de ayer que derivó en urgente movilización de bomberos al frente del comandante Fernando Vázquez, Protección Civil, Policía Estatal, Seguridad Pública Municipal, elementos castrenses y personal de Seguridad Física de Pemex.
Al arribo de los bomberos, Protección Civil y Pemex al lugar, el chorro de hidrocarburo, por la presión, alcanzaba aproximadamente 12 metros de altura, regando el combustible en vasta área afectando tierra de cultivo y consecuentemente el subsuelo.
Personal de la paraestatal procedió a colocar costales con tierra sobre la fuga y un torniquete taponando el orificio de escape, una vez que disminuyó la presión de rebombe, los técnicos se dieron a la labor de retira válvula clandestina y reparar el daño al ducto.
Es la tercera ocasión en que es reabierta esta toma clandestina pues no fue debidamente clausurada, lo que fue una oportunidad para los ladrones de combustible que volvieron a la cargada en horas de madrugada.
Con picos y palas, arrojaron tierra sobre el combustible derramado en amplia zona, y Protección Civil valoraba la emergencia que afortunadamente no representó riesgo para la población.
Las autoridades señalaron que en la madrugada fue “ordeñado” el ducto, y al surgir la fuga, a los “huachicoleros” se les salió de control y emprendieron la huida llevándose su vehículo con diésel, encontrándose en la zona huellas recientes de neumáticos correspondientes a vehículo pesado.
Los hechos fueron del conocimiento de la Procuraduría General de la República Subsede San Juan del Río, que por delito federal dio inicio a una carpeta de investigación, contra de quienes resulten responsables.
