De nueva cuenta apareció la violencia ante la serie de insultos y agresiones de que fue objeto el cuerpo arbitral por jugadores y gente de pantalón largo del equipo de Scribe, durante el partido y no se diga cuándo decretaron la suspensión en los minutos finales del segundo tiempo argumentando, con justa razón, falta de garantías.
Este partido de ida entre de semifinales entre Victoria y Scribe, que como anunciamos previamente iba a sacar chispas y así ocurrió, se encontraba a favor del conjunto albo 2 goles a 0 y suspendió a los 30-35 minutos del segundo tiempo luego de un faul de Lalo Ríos sobre J. Manuel Jaramillo ganándose el primero la expulsión y no conforme con ello se quiso llevar a varios rivales por delante e inclusive agrediendo al jugador rival estando en el suelo, cosa que también hicieron varios jugadores escarlatas que ante la impotencia quisieron arreglar las cosas de forma antideportiva, de esta acción ya no tuvo control el cuerpo arbitral y ante la falta de garantías decidieron suspender el partido y como consecuencia que jugadores y gente de pantalón largo se les fue encima con insultos y agresiones, se los querían comer vivos a los pobres silbantes.
Antes de esto un pseudo aficionado de Scribe, con cerveza en mano, agredió a uno de los árbitros auxiliares (abanderado), ya de ahí se hubiera procedido a la suspensión del partido ya que esto era indicativo de falta de garantías, pero el cuerpo arbitral que en todo momento tuvo que soportar toda clase de insultos de los jugadores y gente del equipo de Scribe les faltó valor y autoridad para suspender en ese momento el partido, exponiéndose y no se diga al equipo Victoria que lo cocieron a patas en cuanta jugada a balón dividido se presentaba, por ahí a Gustavo Ruiz estando en el suelo también le tundieron y luego se presentó una jugada entre Lalo Ríos y José Manuel Jaramillo, donde este último fue agredido arteramente y lo peor las agresiones recibidas cuando estaba en el suelo.
Es de lamentar hablar más de estos acontecimientos antideportivos que del partido en sí, pero una vez más quedó de manifiesto la falta de autoridad y capacidad de los árbitros ante un situación así, no es posible que se dejen insultar de esa manera y esto conlleva a resultados como los que se sucedieron, donde no sólo ponen en peligro la integridad física de los jugadores y sino la propia.
En lo deportivo el Victoria supo plantear su partido ya conociendo al rival y tomar ventaja de 2-0 desde el primer tiempo con goles de Carlos Pérez a los 20 minutos de Marco Antonio García Nascimento a los 35, ventaja que le permitió manejar el partido y con la inteligencia necesaria para evitar la rudeza del equipo rival.
En el segundo tiempo Scribe se fue con todo al frente y tuvo varias oportunidades de gol, para su mala suerte las fallaron, mientras que el Victoria siguió con su misma estrategia de controlar el partido y sobre todo no exponerse ante la desesperación del rival. Los minutos pasaron y ante la impotencia de Scribe la violencia finalmente explotó en esas acciones mencionadas acarreando la suspensión del partido.
No sabemos qué ocurrirá con el partido de vuelta de esta serie eliminatoria, pero como sucedieron las cosas Scribe debe ser castigado ejemplarmente ya que jugadores, seguidores y directivos propiciaron esta situación, de darse un segundo partido sería de alto riesgo, sería dar paso a más violencia y de mayor magnitud que podría lamentarse.
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