El municipio de Huichapan, Hidalgo, ha sido testigo de distintos sucesos importantes, desde el nacimiento de personas ilustres hasta acontecimientos que forman parte de los libros de historia del México. Sin embargo, otro de los aportes que el Pueblo Mágico le ha dado al estado y al país entero es el Carnaval, bebida típica que se ha convertido en un símbolo de la región.
El Carnaval o Carnavalito, como también se le conoce, es una bebida artesanal elaborada a base de jugo de naranja fermentado, cuyo grado de alcohol alcanza los 5.5 por ciento. Los huichapenses describen al Carnaval como una “bebida traicionera”, pues a pesar de que se trata de un licor, su sabor dulce y ligero hace que las personas la consuman sin medida alguna, resintiendo su efecto al cabo de unos cuantos vasos.
Si bien existen diversas leyendas de cómo se originó el Carnaval, una de las comunidades de Huichapan se atribuye su nacimiento, se trata del poblado de San José Atlán, cuyos habitantes aseveran y defienden que es este sitio donde verdaderamente surgió esta tradicional bebida.
Los lugareños de San José Atlán cuentan que el origen del Carnaval se remonta a 1950, cuando una persona dedicada a la preparación y venta de bebidas de frutas decidió hacer un licor a base de naranja. Señalan que el vendedor comenzó la elaboración del producto a finales de año, aprovechando que su materia prima, que venía desde Veracruz, estaba a un bajo precio.
Mencionan que tras unas cuantas semanas, el primer productor sacó a vender su preparación durante la festividad conocida como “Carnaval”, la cual se celebra en San José Atlán durante febrero. Fue desde ese momento cuando la bebida cautivó a propios y extraños, lo que a la postre hizo que varias personas llegaran durante estas fechas a la comunidad solo para probar la tradicional bebida que había sido creada.
Luego de unos años, la bebida ganó popularidad en todo Huichapan y debido a que solo se podía encontrar durante el Carnaval de San José Atlán, las personas la bautizaron de esa forma, “Carnaval”. Tiempo después, la bebida ya no solo se consumió en esa celebración, sino apareció en las festividades más importantes del municipio, principalmente en la Feria El Calvario.
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El Carnaval se convirtió en la bebida icónica de Huichapan y de la región. Al paso de los años otros productores añadieron más ingredientes como tequila blanco, canela y azúcar o piloncillo. Los huichapenses dicen que el Carnavalito no puede faltar en ninguna fecha importante y para la época de calor se recomiendo tomarlo bien frío.
