Cientos de personas se dieron cita en Laguna de Lourdes, en San Juan del Río, para degustar un buen plato de mole, uno de los platillos más típicos y deliciosos no solo del municipio, sino de todo México. Fue durante el Primer Festival del Mole que cuatro comunidades de este municipio se hicieron presentes para exponer la variedad de moles que se preparan en cada una de ellas.
De acuerdo con la autoridad auxiliar de Laguna de Lourdes, Alejandro García Morales, este evento se realizó para resaltar este platillo tradicional que en las comunidades sanjuanenses se ha convertido en uno los protagonistas de los banquetes de fiestas y celebraciones. Además, dijo, esto permitió que las personas de las distintas comunidades, en su mayoría mujeres, dieran a conocer la sazón que las caracteriza.
Durante el festival, los cientos de asistentes pudieron degustar variedades del platillo, desde el tradicional mole rojo, hasta el mole verde, servido sobre una hoja de lechuga y acompañado de frijoles, sopa seca o arroz, bien fuera el gusto.
La actividad, desarrollada en el foro principal de Laguna de Lourdes, congregó a cocineras de las comunidades de La Valla, La Llave y El Organal, quienes en cazuelas de barro ofrecieron sus preparaciones a los chefs profesionales que se dieron cita, pero también a aquellos curiosos en probar el platillo por excelencia bodas, bautizos, quince años y demás celebraciones.
De igual forma, el García Morales puntualizó que el evento permitió reconocer a las mujeres que elaboran este platica y que en algunos casos se ha vuelto una actividad que permite dar sustento a sus familias.
Durante la inauguración, el presidente municipal, Roberto Cabrera Valencia, indicó que la zona de comunidades es una parte fundamental de la demarcación, pues en ellas se preservan tradiciones y costumbres que le dan vida e identidad al pueblo. Destacó que entre ello se encuentra la gastronomía, elementos que es un parte fundamental de la cultura sanjuanense y que, por ello, aseguró, se debe de preservar.
“Lo más bonito que tiene uno y que tienen que cuidar son nuestras tradiciones (…). Lo más bonito que tienen San Juan del Río es su gente, lo más bonito que debemos de preservar hoy es nuestra gastronomía, es un don divino, la cocina.”, subrayó.
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Asimismo, destacó la participación ciudadana de las cuatro comunidades para consolidar este primer Festival del Mole. En ese sentido, dijo que el platillo que prepararon cada una de las personas representa el legado que sus ancestros le heredó, aquella cocina tradicional que a pesar de los años se mantiene viva y continúa deleitando paladares.
