Esta mañana, padres y madres de familia cerraron la escuela primaria Constitución y Reforma, ubicada en la comunidad de San José Galindo, impidiendo de esta manera el inicio de este nuevo ciclo escolar. Lo anterior se realizó, argumentaron madres de familia, debido a la falta de personal docente en dicha institución educativa.
Algunas madres de familia, quienes solicitaron el anonimato, señalaron que esta acción surgió como respuesta al anunció que el día viernes realizó la directora de la escuela primaria Constitución y Reforma, notificando que la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el Estado de Querétaro (USEBEQ) había hecho el recorte del maestro correspondiente al cuarto grado.
“La situación surgió porque la directora de la primaria nos avisó el día viernes que le había llegado información de que iban a recortar un maestro de la primaria, el que iba a dar cuarto grado. Entonces, pues nosotros nos organizamos porque como es posible que a última hora para iniciar ciclo escolar nos van a recortar un maestro y pues fue por esto que padres de familia y comité decidimos cerrar las instalaciones de la escuela para que USEBEQ nos atendiera y nos diera una respuesta”, comentó una madre de familia.
Aseveraron que un par de horas después del cierre de la institución, al lugar arribó personal de USEBEQ, quienes garantizaron que un nuevo maestro llegaría a la escuela primaria para la atender a los alumnos. No obstante, señalaron, dicho personal no precisó la fecha exacta de la llegada del docente.
Mencionaron que la escuela permanecerá cerrada hasta que la USEBEQ atienda la petición relativa la asignación de un nuevo maestro a este plantel educativo. “La escuela permanece cerrada, el día de hoy no entraron a clases y seguirá cerrada hasta que realmente llegue un maestro”, subrayaron.
Refirieron que el plan de los directivos de la escuela en este primer día de clases era reunir a los dos grupos de tercer grado que existen en este plantel educativo para que uno de los maestros fuera asignado al grupo de cuarto.
Sin embargo, padres y madres de familia se opusieron a ello asegurando que con esto se quebrantaban las medidas de seguridad sanitaria, toda vez que se iban a congregar a más de 45 alumnos en un pequeño salón de esta escuela primaria. Ante ello, decidieron cerrar las puertas de la institución educativa, impidiendo el acceso a personal docente, directivos y más de 200 alumnos.
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