Uno de los principales atractivos gastronómicos y clásicos del municipio de Tequisquiapan es el pinole, elaborado en esta localidad por José Antonio Cañada Galván, quien aseguró que diariamente es comercializado entre los visitantes por ser considerada una preparación prehispánica a base de maíz.

Ubicado en el interior del mercado Guadalupano de Tequisquiapan, José Antonio Cañada, expuso que diariamente elaboran 20 kilogramos de pinole y comercializan sobre todo con el turismo extranjero, debido a que lo consideran un alimento prehispánico de origen náhuatl cuyo significado es harina de maíz, proveniente de la palabra, pinoli, refirió.

Al respecto comentó que las generaciones de antes conocieron el pinole como un ingrediente básico para la elaboración de varios platillos, sin embargo, la falta de interés de las nuevas generaciones por aprender la elaboración a base de maíz, canela, piloncillo y chocolate, ha impedido que en pocos lugares se comercialice.

“El pinole es maíz molido con canela, azúcar, canela, piloncillo y chocolate, sigue la tradición aquí en un solo local del mercado Guadalupano de Tequisquiapan, mucha gente lo quiere para hacer atole, se puede comer en diferentes modalidades o solito como mazapán,

Vienen de todos lados a consumirlo, hay desde 25, 30, 60 y 95 pesos, dependiendo el tamaño que tenemos, hay de cuarto, medio y un litro, diario se elabora el pinole y son como 20 kilos, y en temporada festiva se duplica hasta 200 por ciento”.

Señaló que las festividades mexicanos son un momento idóneo para aumentar la comercialización de este producto, debido a que los mexicanos reconocen en el producto un alimento de los antepasados por ello, invitó a los consumidores que gustan del pinole acudan al mercado Guadalupano para degustarlo.

“Los turistas vienen mucho porque dicen que es alimento de antepasados y llama mucho la atención sobre todo entre los estadounidenses, los de Canadá, de Estados Unidos vienen y se llevan varios botes de pinole”.