La otra cara de la moneda de la migración la representa elciudadano estadunidense Fernando Edward Yunes, quien está varadoen la frontera de Sonora y no puede cruzar a Estados Unidos a porcarecer de documentos.
Se le dificulta mucho el español, y fue entrevistado mientrasestaba sentado en una banca del parque Benito Juárez de lalocalidad, que por ahora es su lugar de residencia. Mi situación es que soy un forastero aquí en San Luis, deYuma. Fui deportado porque no tenía la suficiente documentación oidentificación apropiada. Fui deportado. Encontraron sospechosoque la fotografía no se viera como yo”, dijo. Aseguróque su padre está en Yuma, Arizona, y su nombre es Edward YunesSr., “y desconozco su dirección porque se muda de lugar enlugar, pero él conduce un camión blanco”.
Describió que su progenitor tiene el cabello rubio,características distintas, piel más blanca. es bien parecido y muy listo". “Estuve en Yuma por un parde meses, buscaba estar un poco más de tiempo, pero no tengo laidentificación apropiada, documentos, mi padre tiene miidentificación y acta de nacimiento”, refirió.Manifestó que en la frontera de Sonora tiene casi dos años, “hasido un poco lento, este verano, este invierno, el verano es algoraro y es duro estar afuera sin dinero ya que fui deportado sinninguna capacidad financiera”.
Detalló que “yo solo pasaba el rato cuando ellossólo me detuvieron y me deportaron. Sólo miraba una casucha conalguien más y tomando un refresco cuando ellos sólo me tomaron.Ojalá mi padre pudiera traer mis identificaciones y loscertificados adecuados y ayudarme”.Afirmó que nació en un pequeño suburbio llamado Nogales,“nací con un defecto de nacimiento, hígado externo, y mellevaron a Tucson por la emergencia médica. Nací junto a nuevemujeres y yo fui el único varón”.
Reafirmó que nació en los Estados Unidos, donde tambiénestuvo en un programa con A.J. Mitchell (escuela primaria deNogales, Arizona), “y ese programa me trajo de Nogales a Yuma,así que ese podría ser el problema”.
Yunes expresó que cuando llegó a San Luis Río Colorado teníael papel de que fue deportado, por lo que estuvo en el alberguepara gente deportada. Estuve ahí comí y tomécafé, y todo eso, me duché, pero después de eso fui y me dijeronque no podía quedarme. Así que ahora me quedo en esta banca, ycomo de vez en cuando, algunas veces ellos traen comida, eso estábien. Dios está aquí, me mantengo en Dios”, manifestó.Algunas veces la gente acude y le da donativos, "también comprocosas, como lo que me dan y doy gracias a Dios por ello. Así sonlas cosas”.
Como recomendación, dijo a quienes son deportados y no tienenidentificación, siempre hay la posibilidad de que los oficiales dePolicía te ayuden, "pero los de Migración si te quedas en labanca no ayudan aquí". Asumió que “estabanca permite que la gente venga, como a esta entrevista. Ellos teayudan, sólo no te vayas, quédate y trata de luchar".