/ lunes 6 de abril de 2020

Desde la Izquierda

¿Y la tregua apá?


Entender al presidente ha costado mucho trabajo, sus inconsistencias e incongruencias desestabilizan a cualquiera, un día se sincera llama a una tregua y al día siguiente se contradice, sigue con sus empellones para con sus adversarios y desprecia el plan de unidad nacional. Llama a quedarse en casa y guardar la sana distancia y al otro día sale de gira violentando cuanta norma de salubridad ha impuesto su mismo gobierno.

Nadie entiende lo que realmente quiere, un día dice que no habrá ayuda, ni estímulos fiscales para los grandes, medianos y pequeños empresarios, los que generan empleo, por qué los recursos de la renta nacional se destinarán únicamente a los más pobres y al otro día busca reunirse con el sector productivo para hacerles un planteamiento que tampoco nadie entiende.

¡Todas las crisis son transitorias, ninguna es para siempre Señor Presidente! la diferencia está en que hoy no hay ingresos por la renta petrolera, los ahorros que se tenían se los acabaron pensando que nunca habría una crisis; las remesas bajaron drásticamente; en la desesperación por tener recursos extinguió los fondos de los fideicomisos públicos muy seguramente para aplicarlos a sus programas sociales; los contribuyentes analizan no pagar impuestos; y a todo esto ¿Usted insiste que vamos requetebién bien, que el pueblo está feliz, feliz, feliz, que la recuperación será pronta, que no habrá una crisis como en el pasado?

El populismo ramplón de la extrema izquierda se ha apoderado del gobierno, no hay confianza en lo que hace AMLO, la figura del presidente se ha deteriorado aquí y en el extranjero, han abandonado a los estados a su suerte y lo único que les ha interesado fortalecer es su ego político definido en la 4T, ocupando la desgracia de la salud como plataforma electoral para anclar su presencia regalando dinero a diestra y siniestra, sin que en contraparte exista un equilibrio con otros sectores de la población.

“Como anillo al dedo” dijo Andrés Manuel, una expresión que muy probablemente se exprese con júbilo en sus reuniones de gabinete y en Morena, pero que la suelta porque su cerebro ya no tiene filtros, sin medir y sin importarle las consecuencias. Puede que el neoliberalismo sea la causa de grandes diferencias sociales y el empobrecimiento de millones de mexicanos, que la ultra derecha conservadora aplicó políticas depredadoras que afectaron salarios y calidad de vida, pero la extrema izquierda está también cambiándoles para mal la vida a toda la clase media, esa que está sujeta al régimen de impuestos y que ahora los ahoga fiscalmente, los orilla a quebrar y a cerrar negocios, les tiene fobia porque son los más informados, no los rescata, por el contrario intenta reclasificarlos como los nuevos pobres de esta nación, ¡no lo logrará!

Ulises Gómez de la Rosa

Correo: ulisesgrmx@yahoo.com.mx

Face book @Ulises Gómez R

Twitter @Ulisesgrmx

¿Y la tregua apá?


Entender al presidente ha costado mucho trabajo, sus inconsistencias e incongruencias desestabilizan a cualquiera, un día se sincera llama a una tregua y al día siguiente se contradice, sigue con sus empellones para con sus adversarios y desprecia el plan de unidad nacional. Llama a quedarse en casa y guardar la sana distancia y al otro día sale de gira violentando cuanta norma de salubridad ha impuesto su mismo gobierno.

Nadie entiende lo que realmente quiere, un día dice que no habrá ayuda, ni estímulos fiscales para los grandes, medianos y pequeños empresarios, los que generan empleo, por qué los recursos de la renta nacional se destinarán únicamente a los más pobres y al otro día busca reunirse con el sector productivo para hacerles un planteamiento que tampoco nadie entiende.

¡Todas las crisis son transitorias, ninguna es para siempre Señor Presidente! la diferencia está en que hoy no hay ingresos por la renta petrolera, los ahorros que se tenían se los acabaron pensando que nunca habría una crisis; las remesas bajaron drásticamente; en la desesperación por tener recursos extinguió los fondos de los fideicomisos públicos muy seguramente para aplicarlos a sus programas sociales; los contribuyentes analizan no pagar impuestos; y a todo esto ¿Usted insiste que vamos requetebién bien, que el pueblo está feliz, feliz, feliz, que la recuperación será pronta, que no habrá una crisis como en el pasado?

El populismo ramplón de la extrema izquierda se ha apoderado del gobierno, no hay confianza en lo que hace AMLO, la figura del presidente se ha deteriorado aquí y en el extranjero, han abandonado a los estados a su suerte y lo único que les ha interesado fortalecer es su ego político definido en la 4T, ocupando la desgracia de la salud como plataforma electoral para anclar su presencia regalando dinero a diestra y siniestra, sin que en contraparte exista un equilibrio con otros sectores de la población.

“Como anillo al dedo” dijo Andrés Manuel, una expresión que muy probablemente se exprese con júbilo en sus reuniones de gabinete y en Morena, pero que la suelta porque su cerebro ya no tiene filtros, sin medir y sin importarle las consecuencias. Puede que el neoliberalismo sea la causa de grandes diferencias sociales y el empobrecimiento de millones de mexicanos, que la ultra derecha conservadora aplicó políticas depredadoras que afectaron salarios y calidad de vida, pero la extrema izquierda está también cambiándoles para mal la vida a toda la clase media, esa que está sujeta al régimen de impuestos y que ahora los ahoga fiscalmente, los orilla a quebrar y a cerrar negocios, les tiene fobia porque son los más informados, no los rescata, por el contrario intenta reclasificarlos como los nuevos pobres de esta nación, ¡no lo logrará!

Ulises Gómez de la Rosa

Correo: ulisesgrmx@yahoo.com.mx

Face book @Ulises Gómez R

Twitter @Ulisesgrmx

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