/ lunes 24 de agosto de 2020

Cultura Tributaria

Reactivar la economía con medidas fiscales


La pandemia que hoy enfrentamos ha traído diversas consecuencias, tanto en el ámbito personal de la convivencia con el distanciamiento social y desde luego en el aspecto económico impactando hacia diversos ángulos, por un lado los empresarios en los diversos sectores tanto productivo, comercial o de servicios que han visto disminuido sus ingresos o incluso anulados desde el 31 de marzo donde se decretó la emergencia sanitaria exhortando a la población que no participa en actividades laborales esenciales a cumplir el resguardo domiciliario con la limitación voluntaria de movilidad.

Esa disminución de actividades provoca pérdidas importantes en las empresas de todos tamaños, pero sin duda los que menos estaban preparados para ello, son los micro, pequeños y medianos, que por hoy han tenido que hacer frente a todas las obligaciones que implican erogaciones, entre ellas los sueldos, arrendamientos, aportaciones de seguridad social, pagos de deudas, entre otras, sin dejar a un lado que incluso en momentos extremos otros han tenido que abandonar las actividades o despedir a trabajadores, provocando a la vez un incremento en el desempleo.

Esta crisis ha llevado a la suspensión total o parcial de las actividades productivas, en los que se identifican niveles de fuertes, significativos y moderados, afectando de manera mucho más importante al comercio, hoteles, restaurantes, actividades inmobiliarias, empresariales, de alquiler y manufacturas; ante esas afectaciones es evidente que se hace necesario implementar políticas adecuadas para fortalecer la economía existe el riesgo de que se genere un cambio estructural regresivo.

Por hoy se habla de una pérdida de empleos de más de un millón 200 mil, lo que implica que para la recuperación hará falta que en cada año se deban generar más de dos millones; la pérdida de ingreso tanto para las empresas como para las personas genera una disminución en el consumo, por tanto menor demanda en la producción, menos necesidad de contratar, menor circulación de dinero y desde luego menos recaudación de impuestos por el Estado.

Así las cosas, el gobierno debe establecer medidas fiscales que reactiven la economía, si bien es cierto que se no se esperan condonaciones de impuestos bien pueden activarse otras posibilidades que no tengan un costo fiscal para el Estado; una de esas es que el legislador se ocupe de reactivar la compensación universal permitiendo que los impuestos que adeudan los contribuyentes se paguen con los saldos a favor que pudiesen tener en otros; que las devoluciones de saldos a favor se realicen de manera mucho más ágil, deducción inmediata de inversiones, establecer estímulos adicionales para quienes generen más empleos, incluso explorar deducciones adicionales, permitir a los contribuyentes más facilidades para cumplir con las obligaciones fiscales de pago, disminuir los embargos con extracción de bienes o congelamiento de cuentas, entre tantas posibles.

En todo ello, en el aspecto de ingresos para el Estado debe tomarse en consideración que la disminución de las actividades y pérdida de empleos trasciende en la recaudación de contribuciones, atendiendo que las utilidades de las empresas genera la causación del impuesto sobre la renta, y el consumo genera el impuesto al valor agregado además del Impuesto especial sobre producción y servicios, que la reactivación económica genera un circulo virtuoso, incluso por hoy podría pensarse en que el mismo Estado tendría que estar ejerciendo más gasto público provocando el en buena parte movimiento de dinero.

Los legisladores tienen en sus manos también la posibilidad de reactivar con los mecanismos que se han mencionado y como representantes ciudadanos, pensar en estos escenarios para bien de todos.

Comentarios: Sergio@ledezma-ledezma.com

Facebook: Sergio.ledezma.58

*Contador Público Certificado y Licenciado en Derecho

*Expresidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro

*Expresidente del la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionistas del Estado de Querétaro (FECAPEQ)

Reactivar la economía con medidas fiscales


La pandemia que hoy enfrentamos ha traído diversas consecuencias, tanto en el ámbito personal de la convivencia con el distanciamiento social y desde luego en el aspecto económico impactando hacia diversos ángulos, por un lado los empresarios en los diversos sectores tanto productivo, comercial o de servicios que han visto disminuido sus ingresos o incluso anulados desde el 31 de marzo donde se decretó la emergencia sanitaria exhortando a la población que no participa en actividades laborales esenciales a cumplir el resguardo domiciliario con la limitación voluntaria de movilidad.

Esa disminución de actividades provoca pérdidas importantes en las empresas de todos tamaños, pero sin duda los que menos estaban preparados para ello, son los micro, pequeños y medianos, que por hoy han tenido que hacer frente a todas las obligaciones que implican erogaciones, entre ellas los sueldos, arrendamientos, aportaciones de seguridad social, pagos de deudas, entre otras, sin dejar a un lado que incluso en momentos extremos otros han tenido que abandonar las actividades o despedir a trabajadores, provocando a la vez un incremento en el desempleo.

Esta crisis ha llevado a la suspensión total o parcial de las actividades productivas, en los que se identifican niveles de fuertes, significativos y moderados, afectando de manera mucho más importante al comercio, hoteles, restaurantes, actividades inmobiliarias, empresariales, de alquiler y manufacturas; ante esas afectaciones es evidente que se hace necesario implementar políticas adecuadas para fortalecer la economía existe el riesgo de que se genere un cambio estructural regresivo.

Por hoy se habla de una pérdida de empleos de más de un millón 200 mil, lo que implica que para la recuperación hará falta que en cada año se deban generar más de dos millones; la pérdida de ingreso tanto para las empresas como para las personas genera una disminución en el consumo, por tanto menor demanda en la producción, menos necesidad de contratar, menor circulación de dinero y desde luego menos recaudación de impuestos por el Estado.

Así las cosas, el gobierno debe establecer medidas fiscales que reactiven la economía, si bien es cierto que se no se esperan condonaciones de impuestos bien pueden activarse otras posibilidades que no tengan un costo fiscal para el Estado; una de esas es que el legislador se ocupe de reactivar la compensación universal permitiendo que los impuestos que adeudan los contribuyentes se paguen con los saldos a favor que pudiesen tener en otros; que las devoluciones de saldos a favor se realicen de manera mucho más ágil, deducción inmediata de inversiones, establecer estímulos adicionales para quienes generen más empleos, incluso explorar deducciones adicionales, permitir a los contribuyentes más facilidades para cumplir con las obligaciones fiscales de pago, disminuir los embargos con extracción de bienes o congelamiento de cuentas, entre tantas posibles.

En todo ello, en el aspecto de ingresos para el Estado debe tomarse en consideración que la disminución de las actividades y pérdida de empleos trasciende en la recaudación de contribuciones, atendiendo que las utilidades de las empresas genera la causación del impuesto sobre la renta, y el consumo genera el impuesto al valor agregado además del Impuesto especial sobre producción y servicios, que la reactivación económica genera un circulo virtuoso, incluso por hoy podría pensarse en que el mismo Estado tendría que estar ejerciendo más gasto público provocando el en buena parte movimiento de dinero.

Los legisladores tienen en sus manos también la posibilidad de reactivar con los mecanismos que se han mencionado y como representantes ciudadanos, pensar en estos escenarios para bien de todos.

Comentarios: Sergio@ledezma-ledezma.com

Facebook: Sergio.ledezma.58

*Contador Público Certificado y Licenciado en Derecho

*Expresidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro

*Expresidente del la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionistas del Estado de Querétaro (FECAPEQ)