Y llegó el 2024. Un año muy importante para la vida democrática de nuestro país, pues se llevarán a cabo ni más ni menos que las elecciones más grandes e importantes de los últimos años. Aunque México no será el único país; se estima que alrededor de 70 países en el mundo vivirán procesos electorales, lo que significa que más de 3 mil 700 millones de habitantes están llamados a las urnas en sus respectivas naciones, de acuerdo a datos de El País.
Al momento de escribir esta columna, faltan 138 días para votar por presidente de la República, 500 diputados, 128 senadurías, 9 gobernadores, mil 802 presidentes municipales, mil 098 diputados locales, mil 975 sindicaturas, 14 mil 423 regidurías y 431 cargos auxiliares, lo que en conjunto representan 20 mil 367 cargos a elegir, datos proporcionados por Instituto Nacional Electoral (INE), mismo que reporta un padrón electoral de 99 millones 754 mil 112 ciudadanos y una lista nominal de 97 millones 782 mil 429 ciudadanos.
De manera particular, en Querétaro se elegirán a 25 diputados locales, 18 presidencias municipales, 36 sindicaturas y 148 regidurías.
Votar es un derecho de nosotros los ciudadanos, pero también es una obligación, por lo que es necesario que, en primer lugar, revisemos si nuestra credencial de elector está vigente y en caso de que no sea así, tenemos hasta el 22 de enero para actualizar o tramitarla por primera vez. Esto nos dará la posibilidad de participar en el proceso electoral que se avecina.
En los últimos años, se ha intentado manchar la valía del INE, pero no podemos negar que ha sido un pilar fundamental para consolidar nuestra democracia, producto de una lucha fuerte y constante de los ciudadanos; de ahí campañas como #YoDefiendoAlINE que han buscado proteger la independencia y autonomía de este organismo para garantizar que haya elecciones libres, limpias y justas y así no regresar a esos escenarios en donde el gobierno era juez y parte.
2024 se convierte en una nueva oportunidad para que hagamos conciencia sobre nuestro papel como ciudadanos, involucrándose en las peticiones y las propuestas de aquellos que buscarán un puesto de elección popular, ya que no podemos darles un cheque en blanco y que sus promesas de campaña se queden sólo en el folleto y en las buenas intenciones.
La participación ciudadana implica muchas cosas, entre ellas, conocer la historia misma de nuestro país, tanto la antigua como la moderna, pues dicen que quien no conoce su historia, está condenado a repetirla y hay muchos pasajes de nuestra historia antigua y moderna que no deberíamos repetir, como aquella en la que un solo partido político era el que tomaba todas las decisiones por nosotros. Así fue durante más de 70 años.
Por otro lado, es muy importante que en esta época de fake news, de post verdad, de redes sociales y de inteligencia artificial, todos asumamos nuestra responsabilidad, tanto para informar como para informarnos y no ser parte de esa masa que se deja llevar por los rumores, por la guerra sucia y por la desinformación.
El 2 de junio tenemos un compromiso cívico que nos dará una oportunidad de elegir - en el mejor de los casos - a los mejores perfiles. Aquellos que realmente estén preparados y que genuinamente busquen el bienestar de las y los mexicanos sin distingos y sin polarizar. De ahí la importancia de informarnos, de reflexionar y de votar, por quien sea, pero votar y con ello luchar por la defensa de nuestra democracia, esa que se tambalea y que tanto trabajo le ha costado construir a muchas generaciones.
*Presidenta de la Comisión de Inclusión y Bienestar Social de Coparmex Nacional
